sábado, 10 de marzo de 2012

PUEDEN USAR EL DIVÁN, SI PREFIEREN

Un nuevo motivo para festejar, arriba esos vasos y hagamos un brindis por el psicoanálisis, Freud, las minas, la impotencia, frustraciones varias y un puente de humo que puede tocar el alma humana. Ese es el cóctel que hemos intentado armar en "El Pacto de Freud" junto con el licenciado Gervasio (y un humilde, pero leal servidor).



Hace un tiempo habíamos comenzado una bitácora de este viaje y hoy, más que contentos, podemos comenzar a compartir con los lectores de Fierro las andanzas de Freud y Alberto en "El Pacto de Freud". En esta entrega se encontrarán con la teatral presentación que arma Freud alrededor de un misterioso "Puente de humo" que da acceso al alma y pensamiento de las personas. Paralelamente, en el sesenta y pico, desnudaremos las tribulaciones de Alberto, un psicoanalista incomodado por su paciente, y renuente anfitrión de una visita nocturna tan inesperada como desagradable.





Si prendió, el resto pueden leerlo en la edición 65 de Fierro, ahorita en los kioscos. Agradecemos la oportunidad y el espacio brindado a Juan Sasturain y especialmente a Lautaro Ortiz (un amigo de la casa). Es un gusto y un honor compartir esta historia con los lectores de Fierro y, en medio de todas esas páginas, flanquearse con gente querida y talentosa.



Vaya también un reconocimiento a nuestros hermanos de La Productora Carlitos Aón y Cristian Mallea, quienes vertieron cantidades de pareceres y consejos que ayudaron a moldear la cosa, como siempre (no hace falta mencionarlo, pero sí). También, un saludo a los "simpáticous amigous" del norte, la banda de Mister Ari Pliskin, quienes mostraron un profuso entusiasmo por el proyecto en su hora más temprana.

Finalmente llegó la hora de correr la cortinita. Pase, póngase cómodo... recuéstese si quiere. ¿Por el alta me pregunta? el alta está muy lejos, mejor no pensemos en eso ahora. En cambio, cuénteme... ¿como fué la relación con su madre?¿ella le compraba revistas de historieta?